CONGELADOR

CONGELADOR HORIZONTAL

CONGELADOR VERTICAL

Definición

Aparato frigorífico de baja temperatu­ra que permite almacenar alimentos y elaboraciones congelados durante un periodo de tiempo, manteniendo su estado de forma adecuada.

Historia y Transcendencia

La conservación de alimentos en frío es una de las primeras aplicaciones del frío artificial (Ver Nevera y Cámara frigorífica). Pero pronto se reconoció que las temperaturas por encima de 0° C sólo garantizaban una muy limi­tada prolongación de la vida útil de los productos perecederos. Hacia 1860 ya se experimenta con la con­gelación, como consecuencia del in­terés asociado al comercio mundial de carne y pescado congelados. Será el norteamericano Clarence Birdseye quien desarrollará un sistema de con­gelación rápida para la conservación de los alimentos, a partir de la obser­vación de los hábitos de los Inuit en Labrador. En su empresa, Birdseye

Seafoods Inc., experimentó a partir de 1922 un método de congelación mediante aire a-43° C. En 1924, sacó al mercado los primeros guisantes congelados. Se inició así una nueva era para la conservación de la comida, basada en la congelación rápida del producto.

Descripción

CONGELADOR HORIZONTAL (habitualmente -14° C a -26° C)

  • Refrigeración estática
  • Evaporador integrado en las paredes.
  • Sistema StopFrost.
  • Hace que la formación de hielo den­tro del arcón, y en los productos congelados, se reduzca en un 70%.
  • Cuadro orientativo para congelar ali­mentos en el interior de la puerta.
  • Medianera con 2 bandejas conge­ladoras.
  • Sumideros para recoger el agua de la descongelación.
  • Iluminación interior.
  • Tubo evacuador de agua de la es­carcha.
  • Display digital de temperatura en el tirador de la puerta.
  • Función SuperFrost automática.

Hace que la congelación de los ali­mentos sea más rápida.

  • Pilotos de control del funcionamien­to, alarma y SuperFrost.
  • Puerta y cerradura.

CONGELADOR VERTICAL

Congelador estático vertical (habi­tualmente -14° C a -26° C)

  • Display digital de temperatura.
  • Descongelación manual.
  • Placas de evaporación por contacto.

Dependiendo del modelo, el número de placas varía.

  • Espacio interior modificable median­te guías regulables.
  • Función SuperFrost (opcional).

Congelador ventilado vertical profesional (habitualmente -10° C a -35° C)

  • Refrigeración ventilada.
  • Temperatura graduable de -10° C a -35° C.
  • Doble ventilador para asegurar el reparto uniforme de la temperatura en el interior.
  • Descongelación automática.
  • Señal óptica de advertencia del in­cremento incontrolado de tempera­tura.
  • Estantes de rejilla de acero plastifi­cado, regulables en altura.
  • Apto para bandejas de pastelería.
  • Cerradura situada en el panel de mandos.
  • Control electrónico con o sin indica­dor de tiempo real.
  • Carrocería de acero inoxidable o en blanco.
  • Patas regulables en altura (hay mo­delos sin patas).
  • Conectar el aparato a la corriente eléctrica.
  • Llevar a la temperatura óptima.
  • Colocar el producto o elaboración en las condiciones idóneas de etiquetado y protección para su almacenamiento.
  • Colocar el producto en el lugar ade­cuado para su consumo, del más anti­guo al más nuevo.
  • Hacer una manipulación rápida del cie­rre de las puertas para no perder frío.

Aplicaciones culinarias

  • Congelar productos frescos y elabo­raciones (fondos, sofritos, picadas…), para su conservación.
  • Congelación como paso previo a una elaboración: carpaccios, placas de hielo, interiores de coulants, etc.
  • Congelar elaboraciones finales (pla­tos acabados) listos para regenerar y servir.

Observaciones

La congelación es un método que permite la conservación de alimentos durante periodos prolongados, con cambios mínimos en sus caracterís­ticas nutricionales y organolépticas, ya que se solidifica una gran parte del agua que contienen.

La temperatura al comienzo de la con­gelación no es muy distinta para los diferentes alimentos, y queda determi­nada por el contenido en sales, azúcar y ácidos de los líquidos

Recomendaciones:

  • Los congeladores, ya sean horizonta­les o verticales, deben mantener una temperatura de menos de -18 ° C.
  • Es muy importante etiquetar los pro­ductos y elaboraciones con su nom­bre, fecha de elaboración y fecha de congelación.
  • En caso de que el congelador no tenga un termostato que indique la temperatura de manera fiable, poner un termómetro dentro apto para con­gelación.
  • No volver a llenar de alimentos el congelador hasta que llegue a una temperatura de -18° C.

Problemática:

  • En caso de corte del suministro eléc­trico, los congeladores tienen una autonomía de unas 20 horas si no se abren las puertas en ningún caso.
  • No introducir en el congelador nin­gún alimento ni elaboración culinaria que aún esté caliente. Esto evitará la condensación de la humedad dentro del congelador y el consecuente in­cremento de temperatura, que podría afectar a las otras elaboraciones.
  • No introducir ningún alimento o ela­boración que no esté tapado, a ser posible en contacto con su super­ficie, ya que en un plazo breve de tiempo puede coger «gusto de con­gelador», el del aire húmedo recircu­lado en un espacio cerrado.

Limpieza

Desenchufar el aparato de la corriente eléctrica.

Cuándo: periódicamente haremos lim­pieza a fondo siguiendo las instruccio­nes del aparato en cuestión.

Cómo:

  • Dejar descongelar para no tener que quitar el hielo de forma agresiva utilizando utensilios no adecuados (rasquetas, espátulas, etc.)
  • Secar cuidadosamente antes de vol­ver a enchufar.

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