Hacer cocer un preparado líquido para que, por evaporación, resulte más concentrado y sustancioso.
Cocer líquidos a temperatura fuerte y con el recipiente destapado para que evaporen hasta que espesen.
Disminuir el volumen de un líquido por evaporación, manteniéndolo en ebullición, lo que aumenta bastante su sabor por concentración de los jugos y le da más untuosidad o consistencia.